El objetivo que busca Pompeo con su visita a Rusia es... ¿enseñar el garrote?

El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, visitará a Rusia el 13 de mayo. Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que Washington cambie sus planes y el alto funcionario estadounidense no vaya a ninguna parte, opina la periodista rusa Irina Alksnis.

Según Alksnis, el desarrollo de este escenario es bastante probable especialmente si se toma en cuenta el hecho de que esta semana Pompeo pospuso dos viajes para un plazo indeterminado: a Alemania y a Groenlandia.

"No obstante, se puede esperar que todo va según el plan por una simple razón: los estadounidenses necesitan este encuentro más que el Kremlin", escribe la periodista en su artículo para la versión rusa de Sputnik.

Por ahora existe una gran incertidumbre acerca de los temas que Pompeo planea abordar con su homólogo ruso Serguéi Lavrov. La autora del artículo opina que la respuesta a esta pregunta puede encontrarse en la arena internacional. En particular, en el hecho de que Washington protagonizara una escalada simultánea en las relaciones con distintos países como China e Irán.

EEUU decidió elevar del 10 al 25% los aranceles impuestos a las importaciones de artículos chinos, valoradas en 200.000 millones de dólares. Además, Washington acusó a Pekín de haber frustrado las negociaciones cuyo objetivo era alcanzar un acuerdo comercial.

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Esta conducta demostró otra vez más la insolencia abierta de la política exterior estadounidense: al principio Washington acusa a sus socios de cometer infracciones sin presentar pruebas, después impone restricciones causando el pánico en los mercados y posteriormente se pone de acuerdo para empezar las negociaciones.

Un escenario parecido se ha desarrollado con respecto a Irán. Washington volvió a imponer sanciones, empujó paulatinamente a Teherán a abandonar el acuerdo nuclear y consiguió ciertos éxitos: las autoridades iraníes anunciaron que dejarán de cumplir una parte de sus compromisos contraídos en el acuerdo nuclear.

"Algunos países de Europa y Rusia, responsabilizaron a Washington de sabotear el documento sobre el que trabajaron tanto tiempo y en que pusieron tantos esfuerzos y ahora ven cómo este se destruye frente a sus ojos", lamenta Alksnis.

¿Entonces, son los objetivos de la visita de Pompeo a Rusia la demostración de una amistad? Aunque sea así, Alksnis considera que esta amistad es muy relativa. La periodista recuerda que hace tiempo Pompeo prometió que EEUU no permitiría a Rusia a construir el gasoducto Nord Stream 2.

A su vez, una fuente comunicó a la agencia Bloomberg que Washington podría incluir próximamente a Rusia en una renovada lista de países que manipulan su divisa con el fin de alcanzar ciertas ventajas comerciales.

"En general, Washington hace girar su garrote sobre Moscú y da a entender que si no nos azotan, entonces sería un dulce por el que habría que pagar. Sin embargo, Rusia ha demostrado cien veces que no se la puede comprar de esta manera", recalca.

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La periodista considera que Pompeo viene a Rusia por el papel que desempeña en la arena internacional. Al no contar con una potente economía y enormes recursos políticos, Rusia logró ocupar "un nicho único" como neutralizador de los planes destructivos de EEUU y trabaja exitosamente en este ámbito.

Por su parte, Washington, en el apogeo de su poderío geopolítico apostó por protagonizar procesos destructivos en el mundo como desencadenar guerras, instigar crisis económicas y políticas y organizar revoluciones de colores, según la periodista.

"En estas circunstancias el objetivo del secretario de Estado será alcanzar con todos los medios (persuasiones, amenazas o chantaje) la no intervención de Rusia en los conflictos que ya han sido lanzados por Washington", concluye.

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