"Muchas cláusulas de esa ley, impuesta por la saliente Administración de Poroshenko, contradicen las normas internacionales, la Constitución de Ucrania y los acuerdos de Minsk aprobados por el Consejo de Seguridad de la ONU", dijo la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
Este 25 de abril, la Rada Suprema (Parlamento de Ucrania) aprobó la ley "De la garantía del funcionamiento del idioma ucraniano como estatal", que estipula la utilización exclusiva de este idioma en todas las esferas de la vida.
Zajárova señaló que "por su esencia, es una ley de ucranización forzada, ucranización absoluta".
"Sus cláusulas prevén restricciones considerables y, en muchos casos, la prohibición directa del uso del idioma ruso y de los idiomas de las minorías étnicas en diversas esferas de la vida", explicó la diplomática.
En su opinión, es una ley que agrava la división en la sociedad ucraniana.
"Se trata de una norma que no hace más que agravar la escisión en el seno de la sociedad ucraniana y que aleja aún más las perspectivas de la solución de la crisis que atraviesa el país", resumió la portavoz de la Cancillería rusa.
La búsqueda de la solución al conflicto corre a cargo del Grupo de Contacto que celebra reuniones en Minsk.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en unos 13.000 muertos.
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