"No hay y no pueden haber alternativas a la solución pacífica del problema nuclear y otros de la región", dijo el mandatario ruso en un cena de gala ofrecida al líder norcoreano, Kim Jong-un.
Los dos gobernantes mantuvieron este 25 de abril una reunión histórica en la ciudad rusa de Vladivostok.
"Como dice la sabiduría coreana: si unimos las fuerzas, podemos mover la montaña. Estoy convencido de que precisamente esto es la clave del éxito", dijo.
Agregó que con el apoyo de la comunidad internacional y de todos los países involucrados se conseguirá una paz duradera, estabilidad y prosperidad para la península de Corea.
Destacó además que la situación se ha estabilizado en los últimos meses en la península de Corea gracias a las iniciativas de Kim Jong-un.
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Putin saludó también los pasos del liderazgo norcoreano para establecer el diálogo directo con Estados Unidos y para normalizar las relaciones entre las dos Coreas.