"Se lleva a cabo una labor escrupulosa con Japón para la firma de un tratado de paz", dijo el alto funcionario al comparecer este martes ante la prensa.
Tokio, durante décadas, ha condicionado la firma del tratado de paz a la devolución de las islas Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai que pasaron a formar parte de Rusia al término de la Segunda Guerra Mundial.
El portavoz del Kremlin remarcó que Japón conoce perfectamente la posición de la población rusa respecto a las Kuriles.
"Es imposible no tomar en cuenta los recientes estudios sociológicos escrupulosos que se han realizado", dijo.
Según las múltiples encuestas, la mayoría de los habitantes de las Kuriles se oponen a la transferencia de la soberanía de las islas a Japón.
Las Kuriles fueron traspasadas a la Unión Soviética por acuerdos internacionales al finalizar la Segunda Guerra Mundial y Rusia asumió la soberanía de dichos territorios tras la desintegración de la URSS.
Japón reclama las islas escudándose en el Tratado Bilateral de Comercio y Fronteras que firmó con el Imperio ruso en 1855.