"Por desgracia, las sanciones [contra Rusia] tienen una fuerte influencia, especialmente, en el sector agrícola, perdimos cientos de millones, y por lo tanto insisto en volver a la mesa de negociaciones", dijo Borísov en el marco del Foro empresarial ruso-búlgaro sobre turismo en Sofía.
Agregó que a pesar de las sanciones y las fuertes tensiones en el mundo multipolar, Bulgaria y Rusia logran mantener "relaciones de trabajo bastante buenas y pragmáticas".
Desde entonces, Estados Unidos, la UE y otros países, aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia.
Moscú, que respondió a las sanciones con un embargo agroalimentario, ha subrayado en reiteradas ocasiones que no es parte del conflicto en Ucrania, y reafirmó que la adhesión de Crimea se llevó a cabo respetando la legislación internacional y la Carta de la ONU.
Infografía: Sanciones contra Rusia y comercio internacional
