El 12 de febrero se informó que el Reino Unido está enfrascado, junto con sus socios europeos, en desarrollar nuevas sanciones antirrusas relacionadas con el incidente del pasado mes de noviembre en el estrecho de Kerch, cuando varios barcos navales ucranianos violaron la frontera de Rusia y fueron detenidos.
"El Reino Unido, que está a punto de retirarse de la UE, está tratando una vez más no solo de impulsar la espiral de sanciones contra Rusia, sino también de involucrar a otros Estados europeos en sus planes de complicar el mejoramiento de las relaciones de la Unión con Rusia tras el Brexit", dijo el portavoz de la embajada.
El 25 de noviembre de 2018, tres barcos ucranianos violaron la frontera de Rusia al entrar en aguas rusas provisionalmente cerradas, navegando desde el mar Negro hacia el estrecho de Kerch.
Los marineros ucranianos afrontan en estos momentos un juicio por cruce ilegal de frontera.
Moscú calificó el incidente del mar Negro de provocación encargada por Poroshenko para ganar puntos de cara a las elecciones presidenciales del 31 de marzo.
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