Al comentar en entrevista con la revista International Affairs las cartas enviadas por el embajador estadounidense en Berlín, Richard Grenell, a varias compañías alemanas con insinuaciones de que EEUU podría imponerles sanciones por el apoyo al gasoducto Nord Stream 2, Riabkov afirmó que no se trata de un caso aislado.
Estados Unidos "lucha contra la cooperación técnica y militar de una serie de países con Rusia, intenta imponer sus enfoques sobre las propuestas presentadas por Rusia usando chantaje, presión y a veces sobornos", dijo.
El vicecanciller ruso tachó de "cínica, podrida y tóxica" la política de Washington hacia Moscú.
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El proyecto Nord Stream 2 prevé el tendido de dos tuberías de gas con una capacidad total de 55.000 millones de metros cúbicos anuales desde la costa rusa hasta Alemania por el fondo del mar Báltico.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo en numerosas ocasiones que Berlín percibe este proyecto como comercial, pero al mismo tiempo vincula su implementación con el mantenimiento del tránsito del gas ruso por el territorio ucraniano.
Rusia, por su parte, explicó varias veces que se trata de un proyecto puramente comercial y competitivo, que no supone el fin del tránsito del gas ruso a la UE a través de Ucrania.
Infografía: La dependencia de Europa del gas ruso, en cifras
