El 6 de enero el buque estadounidense entró en el mar Negro para realizar una misión de patrullaje y llegó al puerto rumano de Constanta para realizar el 10 de enero ejercicios conjuntos con la fragata rumana Regele Ferdinand en las aguas territoriales de Rumanía y en las aguas internacionales del mar Negro.
"Creo que es una demostración de la fuerza y las capacidades de EEUU", comentó Komoédov, al subrayar que "un barco no puede hacer daño a Rusia".
"Sin duda este buque pasará a lo largo de la costa de Crimea, pero creo que no habrá violaciones", dijo el almirante.
Según los medios, el escenario de las maniobras prevé el desembarco de tropas y de equipos militares.
El Ministerio de Defensa de Rusia, a su vez, informó que el barco de guardia ruso Pytlivi controla las acciones del buque estadounidense.