Tras la reunión mantenida entre los equipos del futuro presidente de México y la delegación enviada por Donald Trump, Marcelo Ebrard, futuro ministro de Relaciones Exteriores del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, dio una conferencia de prensa en la que explicó algunos detalles del encuentro.
Frente a una nutrida concurrencia de periodistas y medios que lo esperaban afuera de un salón de fiestas en la Colonia Roma, no lejos de la Casa de Campaña de MORENA, donde el futuro Gobierno ha instalado su centro de operaciones, Ebrad dijo que hubo "un diálogo franco cordial y una conversación exitosa, que nos deja un optimismo razonable de que México va a encontrar bases de entendimiento con EEUU en los próximos años", y que se entregó a la delegación encabezada por Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, una propuesta de entendimiento con ese país para los próximos seis años del Gobierno que encabezará AMLO a partir del 1 de diciembre de 2018.
Aunque argumentó que no se hará público el contenido del informe elaborado por el equipo de AMLO hasta que no llegue a manos de Trump, sí hizo referencia a cuatro "iniciativas de gran calado" que son los proyectos insignia del futuro Gobierno, a los cuales ya había habido referencia durante la campaña electoral.
El académico dijo en diálogo con Sputnik que los proyectos "de gran calado" mencionados por Ebrard tienen más de 15 años en proceso y han sido discutidos y muy polémicos: "son proyectos que no llevan al desarrollo del país", sostuvo.
"El desconocimiento en materia económica de Marcelo Ebrard deja mucho que desear. Las zonas económicas especiales son un proyecto que inició en México hace una década, en el segundo año de mandato de Felipe Calderón [2008] y que son zonas de manejo libre para el capital extranjero, dónde tiene todas las facilidades. Es una polémica muy fuerte porque, ¿cómo se va a salvaguardar el aparato productivo mexicano con esto?", cuestionó.
"Se trató de manejar que las zonas económicas especiales de manera provisional. Iban a impulsar el desarrollo del país, cosa que no sucedió. Los capitales nacionales reclamaron por las facilidades obtenidas por estas empresas", indicó.
"Durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto se manejaron varias de estas zonas económicas especiales en Lázaro Cárdenas [puerto de Michoacán, en el Pacífico] Coatzacoalcos [en Veracruz, sobre el Golfo de México] la mencionada en el Istmo de Tehuantepec, en la zona Maya, [sur del país] en Sonora y en la parte fronteriza de Chihuahua [norte]. Pero ahora tienen más problemas que durante los Gobiernos de Calderón y Peña Nieto", agregó.
"Hay un grupo de estadounidenses y de su Gobierno a los que ya no les convence el TLC. Y no nada más a ellos, hay una postura a nivel mundial, como los británicos, que no están de acuerdo con el establecimiento de zonas de comercio general y promueven, en cambio, la instalación de zonas especiales antes que acuerdos comerciales entre regiones muy grandes o entre países", sostuvo.
"Pero el problema de la falta de inversión en México no se soluciona con este tipo de medidas. Por eso creemos que Trump planteó renegociar el TLC de América del Norte, porque no les interesa ya", señaló.
Trenes y árboles
"El proyecto de Ebrard de construcción de una línea férrea en la zona maya también tiene 10 años. Incluso se había hablado de un tren interconectado continental, de Alaska a Sudamérica, que se ocupe del control del tráfico de mercaderías con cuotas, similar a como lo hacían los europeos. Este proyecto férreo fue planteado en el sexenio de Vicente Fox, tuvo varios nombres como el Plan Puebla Panamá o el proyecto de desarrollo del Istmo y no se pudo echar a andar", dijo Lozano a este medio.
Estos proyectos tomaron fuerza como alternativas a la saturación del Canal de Panamá, pero, indicó el académico, no es un tema sobre el que tenga competencia el Gobierno federal, ya que las líneas férreas mexicanas fueron concesionadas por 100 años a empresas extranjeras (Kansas City Southern y Union Pacific) luego de la firma del TLCAN.
"Eso habla de su desconocimiento en materia económica y de trenes y ferrocarril. Además, es mentira. Porque sólo se podría lograr si el futuro Gobierno planteara la nacionalización del ferrocarril", remarcó.
"Cuando este proyecto se planteó durante el Gobierno de Fox, el Instituto Nacional de Migración mexicano sostuvo entonces, en conjunto con el Gobierno de EEUU, que la reforestación de la zona sur serviría para detener a la migración proveniente de Centroamérica, que les haría más difícil el paso por la frontera sur de México, al convertirse en una barrera natural para su paso", señaló.
"Además, EEUU había planteado su interés en tener zonas de observación en esa parte del país, no sólo de migrantes sino por el tráfico de droga y armas, para distintas partes del mundo. Ahora resulta que quien será secretario de Relaciones Exteriores habla abiertamente de un política antimigrante, muy parecida a la que aplica EEUU en su frontera sur", sostuvo en diálogo con Sputnik Luis Lozano.
En un artículo escrito por el periodista independiente John Ross y publicado en el diario La Jornada en octubre de 1998 ("Big Pulp vs. Zapatistas, Sueños de celulosa en el sureste mexicano") se señala que uno de los principales impulsores de este proyecto era entonces Alfonso Romo, titular del grupo económico Pulsar, que tiene empresas del rubro, quien ahora, fue designado como futuro Coordinador de Presidencia en el futuro Gobierno de López Obrador, así como fue el responsable de la elaboración de su "Proyecto de Nación".
En cuanto a la delegación estadounidense, después de la reunión sostenida con el Gobierno que viene, Pompeo y su grupo se reunieron con los jerarcas de la actual Administración de Peña Nieto. Al finalizar, dieron una conferencia de prensa conjunta en la sede de la secretaría de Relaciones Exteriores, que estaba fuertemente custodiada por un operativo militar y policial.
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A pesar de que esa mañana se había conocido que Videgaray había enviado una misiva al Gobierno estadounidense, rechazando su propuesta de firmar un acuerdo de "tercer país seguro" (que obligaría a cualquier persona migrante que buscara llegar a la frontera norte, a solicitar asilo en México y no en Estados Unidos) este tema no fue parte de la conferencia de prensa, en la cual no se permitieron preguntas adicionales.