Federación Europea de Periodistas cuestiona la encarcelación de Vishinski en Ucrania

MOSCÚ (Sputnik) — La Federación Europea de Periodistas considera que la encarcelación del jefe del portal RIA Novosti Ukraina, Kiril Vishinski, es ilegítima, afirmó a Sputnik el secretario general de la federación, Ricardo Gutiérrez.

"Seguimos preocupados por el caso de Vishinski; consideramos que su encarcelamiento es ilegitimo por la falta de elementos que lo justificarían", dijo.

Destacó que desde el momento del escenificado asesinato del periodista ruso Arkadi Bábchenko, "ya no es cierto a quién hay que creer en Ucrania".

Según Gutiérrez, el falso asesinato montado por los servicios especiales ucranianos causó daño no solo al crédito de los periodistas en todo el mundo, sino que desprestigió a Ucrania.

El 15 de mayo pasado, Kiril Vishinski, jefe del portal RIA Novosti Ukraina, con nacionalidad ucraniana y rusa, fue detenido en Kiev con el argumento de que apoyaba a las milicias de Donbás, y dos días después una corte ordenó su arresto por 60 días sin posibilidad de fianza.

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El Gobierno ucraniano acusa al periodista de alta traición, por lo que podría ser condenado a una pena de hasta 15 años de prisión.

En el caso de Bábchenko, periodista ruso crítico con el Kremlin, los medios ucranianos y el Gobierno anunciaron a finales de mayo que había sido asesinado en la puerta de su vivienda en Kiev por un sicario.

Inesperadamente, al día siguiente el periodista reapareció vivo en una rueda de prensa del jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), Vasili Gritsak, que anunció que contaba con datos sobre un supuesto plan para asesinar a Bábchenko y reveló que las noticias sobre su muerte fueron parte de una operación especial para prevenir el presunto ataque.

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Tras ello, el fiscal general ucraniano, Yuri Lutsenko, declaró que el SBU tiene una lista de personas a quienes supuestamente planeaban asesinar después de matar a Bábchenko.

La farsa organizada por los servicios de seguridad ucranianos provocó la condena enérgica de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) y otras asociaciones como la Unión de Periodistas de Rusia que calificó el montaje de poco ético.