"Si resulta un precedente positivo en el tema de la desnuclearización de la península de Corea, no solo lo saludaremos sino, como ha sido antes, contribuiremos al máximo en materia práctica, desde el punto de vista del apoyo político y de las propuestas concretas encaminadas a la implementación de estos conceptos", dijo a Sputnik.
"Al igual de ustedes, también vemos la televisión, seguimos los comentarios que hacen las dos partes, no hemos visto los documentos, pienso que todavía no han sido publicados, pero, sin duda, la celebración de la cumbre de por sí es un hecho positivo", dijo Lavrov a los periodistas.
Asimismo el Ministerio de Exteriores de Rusia publicó un comunicado en que saludó las negociaciones de los líderes de EEUU y Corea del Norte.
"Aplaudimos la celebración de las consultas del presidente de la Comisión de Asuntos Estatales de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente de EEUU, Donald Trump", reza un comunicado ministerial.
La Cancillería rusa aseveró que Moscú continuará "emprendiendo los esfuerzos para apoyar el proceso político y diplomático en torno a la península de Corea".
El ministerio ruso saludó también la renuncia de Trump a las maniobras militares en la península de Corea durante las negociaciones con Pyongyang.
"Valoramos positivamente la declaración del presidente de EEUU, hecha al término de la reunión, sobre la inadmisibilidad de celebrar ejercicios militares durante las negociaciones", indica la nota.
El Ministerio expresó su convicción de que "la suspensión de las provocaciones es un paso imprescindible hacia la distensión en torno a la península".
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La cumbre de Trump y Kim se celebró el 12 de junio en Singapur.
Además EEUU y Corea del Norte se comprometieron a establecer nuevas relaciones bilaterales "que respondan al deseo de los pueblos de ambos países por la paz y la prosperidad" y aunar los esfuerzos para construir un régimen de paz duradero en la península de Corea.
La cita se iba gestando desde inicios de marzo y fue precedida por dos cumbres intercoreanas, las primeras en celebrarse en una década.
A finales de mayo, la reunión de Trump y Kim estuvo a punto de anularse tras un acalorado intercambio verbal entre las partes, sin embargo, a principios de este mes fue confirmada para este día 12.
