El mandatario ruso también advirtió que las posibles provocaciones de Kiev en Donbás entrañan consecuencias graves para Ucrania como Estado.
"Espero que no lleguen a tener lugar ese tipo de provocaciones, y si eso ocurre, creo que entrañaría consecuencias muy graves para Ucrania como Estado", dijo Putin durante la tradicional sesión de respuestas a las preguntas de sus conciudadanos.
Putin apuntó que se debe seguir "el camino del cumplimiento de los acuerdos de Minsk" y aseguró que Rusia, por su parte, "hará todo para que [la crisis ucraniana] sea resuelta en el marco del proceso de Minsk".
El mandatario ruso reafirmó también el compromiso de su país de seguir ayudando a Donetsk y Lugansk.
"Vemos lo que está pasando allí y vemos cómo la gente lo aguanta, prestamos ayuda a estas repúblicas no reconocidas y lo seguiremos haciendo", dijo.
"Lo que sucede en esos territorios es, evidentemente, muy penoso, pero eso muestra, por cierto, además que el actual Gobierno de Ucrania no es capaz de resolver ese problema", dijo el líder ruso durante su tradicional Línea Directa.
El mandatario subrayó que la crisis interna en Ucrania aumenta a medida que se acercan las elecciones, y las autoridades del país no pueden resolver el problema de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Donbás, "entre otras cosas, porque no están interesadas en los electores de esos territorios".
"Está claro que ellos nunca votarían por el Gobierno actual", resumió el presidente ruso.
"Si las autoridades (…) siguen saqueando a su pueblo e invirtiendo ese dinero para el día de mañana en los paraísos fiscales, bajo su propio nombre, esa situación no puede conducir a nada bueno" advirtió el político.
El presidente ruso aseguró que los pueblos ruso y ucraniano tienen un pasado y un futuro común.
"Siempre he considerado a Ucrania como un país hermano y creo que los ucranianos y los rusos son prácticamente un pueblo; tenemos un pasado común, y estoy seguro de que, pese a todas las tragedias de hoy en día, tenemos un futuro común", dijo.
El mandatario ruso subrayó que la situación en Donbás es "una gran tragedia del pueblo ucraniano y de nuestros compatriotas (rusos)".
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en el este de su territorio donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk en respuesta al violento cambio de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
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Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más 10.300 muertos.