"En la situación actual, muy tensa y difícil, los lazos ruso-nipones pueden desempeñar un papel estabilizador muy importante ya que nuestras relaciones se construyen con fundamentos de la igualdad de derechos, no interferencia en los asuntos internos, respeto de los intereses legales de cada uno, la búsqueda de vías para la colaboración amplia de beneficio mutuo en ámbitos diversos", dijo Galuzin en una entrevista concedida a Parlámentskaya Gazeta.
Galuzin indicó que no todos los países "basan las relaciones con sus socios extranjeros en los principios mencionados".
"En este contexto, pienso que las relaciones ruso-niponas en general y la próxima cumbre desempeñarán un papel estabilizador en las condiciones de las turbulencias en el escenario mundial", agregó.
En mayo de 2016 el primer ministro japonés, Shinzo Abe, durante una reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin, propuso un plan de cooperación entre los dos países.
La iniciativa prevé impulsar la colaboración bilateral en ocho ámbitos: servicios médicos, pymes, hidrocarburos y energía, desarrollo industrial, exportaciones en el Lejano Oriente ruso, energía nuclear y altas tecnologías, planificación urbana e intercambios humanitarios.