"Formalmente tratan de acusar a Rusia de haber violado la ley estadounidense que prohíbe la cooperación militar con Irán, Corea del Norte y Siria, (…), en realidad de trata del simple deseo de vengarse por el fracaso del ataque de misiles contra Siria que EEUU emprendió el 14 de abril junto con Reino Unido y Francia, en violación del derecho internacional", señala el documento.
La Cancillería rusa resaltó que la ley de EEUU que proscribe la cooperación militar con Teherán, Pyongyang y Damasco "no puede tener nada que ver con Rusia".
"Por lo visto, la causa es que enseñaron y prepararon bien a los militares de las fuerzas antiaéreas de Siria, que derribaron la mayor parte de los misiles de los agresores occidentales", señala el comunicado de la Cancillería rusa.
En la lista negra de Washington aparecen además Rosoboronexport y la Dirección Principal de Inteligencia del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia.
"Las actuales sanciones son de hecho el reconocimiento de que los militares antiaéreos sirios el 14 de abril mostraron de manera convincente las posibilidades de las armas de producción soviética y rusa, al impactar con eficacia contra los misiles", subraya el texto.
El 14 de abril, Estados Unidos, Francia y Reino Unido bombardearon a Siria bajo el pretexto del supuesto uso de agentes tóxicos en Duma que, según los Cascos Blancos y las facciones armadas que operan en la zona, tuvo lugar el 7 de abril.
Damasco rechazó todas las acusaciones de Occidente del uso de armas químicas y recordó que destruyó todo su arsenal de sustancias tóxicas, algo que fue convalidado por la OPAQ en 2016.
Moscú, por su parte, calificó el presunto incidente de Duma de un "montaje" y criticó enérgicamente el ataque occidental contra Siria, "un Estado soberano que está en la primera línea de la lucha contra el terrorismo".
Más aquí: Cómo los Tomahawk socavaron la reputación bélica de EEUU
El Ministerio de Defensa ruso estima que EEUU y sus aliados emplearon en el ataque contra Siria más de un centenar de misiles de crucero, bombas guiadas y misiles aire-tierra, de los cuales solo una quinta parte alcanzó los objetivos declarados.