Saludamos la declaración del presidente del Partido del Trabajo de Corea, Kim Jong-un, aprobada el 20 de abril mediante un decreto del pleno del Comité Central del Partido del Trabajo, de que Corea del Norte renuncia a las pruebas nucleares y de misiles a partir del 21 de abril", dice la nota ministerial.
"Llamamos a EEUU y a Corea del Sur a actuar con reciprocidad para disminuir las actividades militares en la región y llegar a unos acuerdos mutuamente aceptables con Corea del Norte en las futuras cumbres intercoreana y estadounidense-norcoreana", dijo la Cancillería.
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El ente diplomático ruso constató, además, que la situación en la península coreana se está desarrollando de acuerdo con la hoja de ruta propuesta por Rusia y China que supone, en particular, el congelamiento de las actividades militares en la región y los contactos directos entre Pyongyang, Washington y Seúl.
Al mismo tiempo, el país prevé mantener su arsenal nuclear, aunque se compromete a no emplear estas armas mientras no haya amenazas o provocaciones nucleares en su contra, y renuncia a transferir armas y tecnologías atómicas a otros Estados.
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El anuncio de Pyongyang se produce de cara a la cumbre intercoreana prevista para el 27 de abril y a la reunión de los líderes de Corea del Norte y Estados Unidos, que por ahora no tiene fecha pero podría producirse a principios de junio o incluso antes, según la Casa Blanca.
