"Nosotros no nos planteamos el asunto de si reconocer o no los resultados de las elecciones, partimos de que lo principal es la voluntad del pueblo y cuando esta se exprese vamos a configurar en consecuencia nuestra futura política hacia este país", dijo.
El diplomático añadió que el Ministerio de Exteriores ruso no dispone de información de si habrá observadores rusos en los comicios de Venezuela y que es la Comisión Electoral Central de Rusia quien se ocupa del tema.
"La política de EEUU con respecto a Venezuela nos parece bastante destructiva e irracional", apuntó.
El diplomático señaló que Washington intenta "crear un caos supuestamente controlado, aunque poco les va durar mucho esa capacidad de control, y agravar la situación socioeconómica (en Venezuela) provocando la falta de liquidez, la crisis alimentaria, de fármacos, etcétera".
"De hecho, están instigando el descontento extremo y una rebelión", añadió.
Las restricciones económicas impuestas por EEUU a Venezuela suponen, a su juicio, "un intento de alcanzar determinados objetivos propios en el ámbito internacional a expensas de los venezolanos de a pie cuyas condiciones de vida van a empeorar en considerablemente".
En la Cumbre de Las Américas en Perú, 15 jefes de Estado más el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, hicieron un llamado al Gobierno de Venezuela para que lleve adelante elecciones con "las garantías necesarias" y aseguraron que unos comicios que no cumplan esas condiciones "carecerán de legitimidad y credibilidad".
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El Gobierno de Venezuela calificó este pronunciamiento de injerencista.
En Venezuela no hay crisis humanitaria
Rusia comparte la evaluación de Caracas de que en Venezuela no hay crisis humanitaria, destacó el diplomático.
"Estamos de acuerdo con los colegas venezolanos de que allí no existe crisis humanitaria, pero al mismo tiempo estamos dispuestos a tomar medidas concretas para ayudar a resolver los problemas sociales y económicos que enfrenta el país", dijo.
El ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, declaró a principios de abril que EEUU busca derrocar al presidente Nicolás Maduro "usando un pretexto descabellado de una crisis humanitaria que no está presente en Venezuela".
