"Todavía esperamos respuesta de nuestros compañeros estadounidenses a las preguntas que (…) surgieron sobre la base de declaraciones públicas hechas por gobernadores de algunas provincias afganas de que helicópteros no identificados, probablemente relacionados con las fuerzas de la OTAN, realizan vuelos a las áreas donde se encuentran los combatientes", dijo Lavrov tras una reunión con su par pakistaní, Khawaja Muhammad Asif.
"Por eso nos preocupa mucho lo que está pasando en Afganistán, la expansión de la influencia de Daesh (Estado Islámico, prohibido en Rusia), y además cuestionamos la reacción de la coalición liderada por EEUU a esta amenaza y las medidas que toma para eliminarla", añadió el canciller.
Lavrov recordó que todo eso sucede después de que EEUU adoptara una nueva estrategia para Afganistán que prevé solucionar la crisis por medio de la fuerza.
"De momento no entendemos bien contra quién van a utilizar esta fuerza", puntualizó Lavrov.
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En agosto pasado Trump anunció la nueva estrategia de EEUU en Afganistán: aunque evitó dar detalles sobre el nuevo plan, dejó claro que las tropas estadounidenses no se irán del país asiático en el futuro próximo.
Según medios, la nueva estrategia prevé aumentar el número de las tropas estadounidenses en Afganistán de 8.500 a 12.500.
La misión en Afganistán concluyó en 2014, mientras que el 1 de enero de 2015 la OTAN anunció su nueva operación en el país, bautizada Apoyo Decidido, para entrenar y asistir a las fuerzas de seguridad afganas.
Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques que lanzan el movimiento radical Talibán (proscrito en Rusia) y, desde 2015, Daesh.
