Desde que el 7 de febrero por la noche apareciera en televisión el jefe de la Policía, Roni Alsheich denunciando que una alta instancia de la autoridad (aparentemente Netanyahu) ha ordenado seguir a los agentes encargados del caso, Netanyahu ha emitido tres comunicados consecutivos.
"¿Acaso pueden esos investigadores, que piensan que el sospechoso los está siguiendo o enviando a alguien a denunciar que el jefe de su división comete acoso sexual, hacer su trabajo con objetividad?", pregunta Netanyahu.
Le puede interesar: Polémica en Israel por el audio de un hijo de Netanyahu bajo efectos del alcohol
Este 8 de febrero se ha sabido que Alsheich informó inmediatamente al abogado del Estado cuando se descubrió que investigadores privados estaban investigando a los investigadores de la policía anticorrupción y sus familias.
En cualquier caso, la policía no tiene la última palabra y será el abogado del estado quien, después de examinar el material recogido por la policía, decidirá si se procesa o no a Netanyahu.
Lea también: Detienen a dos abogados israelíes cercanos a Netanyahu por presunta corrupción
En el entorno del primer ministro han salido en defensa de Netanyahu e indican que la policía está preparando un auténtico "golpe de Estado" para acabar con su carrera política.
La investigación policial se centra en dos casos. En el primero, conocido como Caso 1.000, la policía sospecha que Netanyahu y su esposa recibieron regalos valorados en cientos de miles de euros de un amigo al que Netanyahu ayudó extralimitándose en sus competencias.
El segundo caso, conocido como Caso 2.000, tiene que ver con las reuniones que Netanyahu mantuvo con el propietario del diario Yediot Ahronot y en las que hay indicios de corrupción.