"No es un secreto que nuestras relaciones se encuentran en un punto muy bajo, no por nuestra iniciativa", dijo al inaugurar una reunión con su par británico Boris Johnson.
El ministro ruso subrayó que Moscú, a su vez, busca un debate directo con Londres de los problemas bilaterales.
"Quisiéramos debatir las preocupaciones recíprocas directamente, no mediante micrófonos sino cara a cara", dijo.
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El canciller ruso destacó que las negociaciones con Johnson de este viernes tienen por objetivo definir los pasos concretos para mejorar las relaciones entre Londres y Moscú.
El canciller británico subrayó que "es preciso hablar de esas cosas" de manera honesta y "admitir que obstaculizan nuestras relaciones".
Entre los ámbitos de cooperación mencionó también el problema norcoreano y la situación en Siria.
Johnson confió en que Moscú y Londres logren hallar la oportunidad para cooperar.
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Se trata de la primera visita del canciller británico a Rusia en más de cinco años.