"No buscamos profundizar la confrontación pero, por supuesto, seguiremos respondiendo a los pasos hostiles de acuerdo con el principio de reciprocidad", dijo Lavrov en una comparecencia ante el Consejo de Federación (Senado) de Rusia.
Sin embargo, precisó Lavrov, "no estamos observando" ningún avance por parte de EEUU en ese ámbito.
En las relaciones entre Moscú y Washington surgieron considerables problemas últimamente.
El 27 de julio el Congreso de EEUU aprobó un nuevo paquete de sanciones contra Rusia y al día siguiente el Ministerio de Exteriores ruso propuso al Gobierno estadounidense recortar la plantilla de sus legaciones diplomáticas y consulares en el país a 455 personas, el mismo número que Rusia tiene en el territorio estadounidense.
El Ministerio de Exteriores ruso cumplió la petición de Washington pero la calificó como un acto hostil y una burda violación del derecho internacional.
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El polémico acuerdo nuclear
"Algunos importantes acuerdos internacionales, como el pacto sobre el programa nuclear iraní, corren riesgo de romperse, lo que enviaría un mensaje equivocado para los que esperan resolver el problema en torno a la península de Corea, aunque espero que no suceda", dijo.
El ministro también expresó su preocupación "por la situación en torno a la península de Corea", y subrayó que la única oportunidad de resolver el problema es "reducir paulatinamente las tensiones y pasar a las negociaciones".
Lavrov recordó que Rusia y China presentaron una hoja de ruta para resolver el problema que propone declarar una moratoria simultánea sobre el programa norcoreano de misiles y armas nucleares y los ejercicios conjuntos a gran escala de EEUU y Corea del Sur, así como avanzar hacia la desnuclearización de la península de Corea.
"El número de los que apoyan este enfoque aumenta", señaló el canciller ruso.
El PAIC, firmado en julio de 2015 por Teherán y el Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania), establece limitaciones al programa nuclear iraní para excluir su posible dimensión militar a cambio del levantamiento de sanciones internacionales.
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El pacto, que según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) cumple Irán, permitió reducir tensiones en Oriente Próximo, pero fue puesto en peligro en octubre por EEUU, que considera necesario modificar o cancelar el acuerdo porque, a juicio de la Casa Blanca, Teherán viola sus compromisos nucleares.
Pyongyang defiende el desarrollo de su programa nuclear y de misiles alegando las amenazas de Washington.
EEUU, por su parte, intenta salir de la crisis promoviendo más sanciones contra el Estado juche y llevando a cabo ejercicios militares en la región, como las dos maniobras conjuntas con Corea del Sur y Japón de este diciembre.
Las relaciones con Ucrania
El canciller ruso apuntó que no ve indicios de que Ucrania quiera normalizar las relaciones con Rusia.
"A decir verdad, no veo indicios" de ello, dijo Lavrov.
Desde el comienzo del conflicto ucraniano los dos ministros se reunían solo en el marco del cuarteto de Normandía (Alemania, Francia, Ucrania y Rusia).
El cuarteto de Normandía es, junto con el Grupo de Contacto Trilateral (Rusia, Ucrania y la OSCE), la principal plataforma de consultas que buscan resolver la crisis ucraniana que provocó más de 10.300 muertos, según datos de la ONU.
Los habitantes de las provincias ucranianas de Donetsk y Lugansk no reconocieron la legitimidad del cambio violento de poder en Kiev perpetrado en febrero de 2014 y en abril del mismo año proclamaron en mítines la creación de repúblicas populares.
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Las autoridades ucranianas las calificaron como territorios ocupados y en abril de 2014 lanzaron una operación militar contra las milicias de estas repúblicas autoproclamadas.
