"Creo que ni los testimonios de los representantes de las compañías Twitter, Facebook y Google, ni otras pruebas que muestran que Rusia no intervino en las presidenciales de EEUU cambiarán la postura" de Washington, dijo.
A juicio de la diputada, Washington seguirá promoviendo las acusaciones contra Moscú por dos razones principales.
"Y segundo, se trata de un intento de desacreditar la dirección de Rusia y poner en duda la legitimidad de las futuras presidenciales rusas", programadas para marzo de 2018, indicó.
Pánina destacó la necesidad de "promover una imagen positiva de Rusia en los países extranjeros y en particular entre los estadounidenses".
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El 1 de noviembre la embajada rusa en EEUU confirmó que abogados de Twitter, Facebook y Google confirmaron ante los Comités de Inteligencia de ambas cámaras del Congreso estadounidense que no disponen de pruebas de injerencia rusa en las presidenciales norteamericanas.
Rusia rechazó en reiteradas ocasiones las acusaciones de Washington de haber intentado influir en las elecciones y declaró que todo forma parte de una campaña sin precedentes para denigrar al presidente de EEUU.
