"La continua presión de sanciones y los intentos de lograr que cambiemos del curso causan mucha preocupación, lo percibimos como una continuidad negativa y destructiva de lo que se impulsó durante la presidencia de (Barack) Obama", dijo a los periodistas al comentar las nuevas sanciones de EEUU contra Rusia.
El diplomático añadió que en Rusia no ven nada más que ciertas señales de Washington "sobre las intenciones de normalizar las relaciones con Rusia y algunas afirmaciones de que el Gobierno de EEUU quiere trabajar en este asunto".
El 31 de octubre, el Departamento del Tesoro de EEUU publicó una directiva que prohíbe a particulares y entidades estadounidenses realizar negocios con empresas rusas en proyectos de aguas profundas, árticas y de esquisto bituminoso.
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El Departamento de Estado de EEUU comunicó más tarde que con estas medidas Washington busca obligar a Rusia que respete los acuerdos de Minsk y renuncie a la "actividad cibernética ilegal".
