"Demandamos que la compañía diera explicaciones sobre este contrato", dijo.
"Por ahora Rosneft no ha presentado explicaciones algunas", dijo.
Yihad recordó la postura del Gobierno iraquí de que cualquier contrato firmado sin consenso del Gobierno federal se considera ilegitimo.
El 18 de octubre la petrolera rusa Rosneft anunció un acuerdo con las autoridades del Kurdistán iraquí necesario para empezar a explotar los recursos de hidrocarburos en esa región.
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La empresa podría pagar cerca de 400 millones de dólares para adquirir una participación del 80 por ciento en cada uno de los cinco bloques de extracción.
En septiembre pasado Rosneft comunicó que junto con las autoridades del Kurdistán iraquí prevé construir en el territorio de la autonomía un gasoducto que exportará gas a Turquía y Europa.
El servicio de prensa de la petrolera rusa informó que el proyecto se realizará según el plan BOOT (construir, poseer, gestionar, transferir, por sus siglas en inglés).
Se espera que la tubería proporcione 30.000 millones de metros cúbicos anuales.
También agregó que el Ministerio de Petróleo de Irak y la compañía británica BP acordaron crear un grupo de expertos para evaluar la situación en los yacimientos petroleros en Kirkuk.
"Los funcionarios del Ministerio de Petróleo de Irak celebraron una reunión con el responsable del BP para Oriente Próximo, llegaron a un acuerdo de formar un grupo de expertos para evaluar la situación, así como para lograr cierta cooperación en ese contexto", dijo Yihad.
Añadió que se espera que los expertos evalúen e investiguen los yacimientos que la compañía británica tiene previsto desarrollar.
El encuentro entre los representantes de la BP y el ministro de Petróleo de Irak, Jabar Luaibi, tuvo lugar el pasado 23 de octubre en Bagdad.
