"Los medios rusos y, particularmente, Radio Sputnik, son excesivamente satanizados por los políticos estadounidenses (…), lo que se está diciendo de los medios rusos solo puedo catalogarlo como un nuevo paso inamistoso dirigido a obstaculizar su trabajo y a continuar atizando la histeria antirrusa", dijo el también miembro del Consejo de DDHH de la presidencia rusa.
La radio comenzó a emitir en la frecuencia 105,5 FM en Washington ocho meses después de finalizado el proceso electoral.
Para Brod, las acusaciones infundadas contra la emisora rusa son motivo suficientes para que los organismos defensores de los derechos y la libertad de expresión del país norteamericano comiencen a investigar el caso.
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Señaló que si los congresistas creen que los medios de comunicación de alguna manera tergiversaron la información o violaron cualquier norma ética o legal, tienen que demostrarlo ante los tribunales.
Según esas informaciones, el FBI obtuvo el derecho de acceder a la correspondencia de Feinberg y de otro excorresponsal, Joseph John Fionda, en la oficina de la agencia en Washington.
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La directora del canal ruso RT y de Sputnik, Margarita Simonián, al comentar el interrogatorio, constató la muerte de la libertad de prensa en el país que la inventó.
El Parlamento Europeo aprobó en noviembre pasado la resolución 'Comunicaciones estratégicas de la UE para contrarrestar la propaganda de terceras partes', en la que se asegura que Rusia lleva a cabo una "propaganda hostil" contra la UE con la ayuda de los medios de prensa, fundamentalmente Sputnik y el canal de televisión RT.
El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró que dicha resolución muestra "un desgaste obvio de la noción de democracia" en la UE.
