Los dos diputados acordaron verse las caras en el puente Allenby en el marco de la crisis que la semana pasada estalló en Amán cuando un guardia de seguridad de la embajada de Israel mató a dos jordanos, después de que uno de ellos intentara apuñalarlo, según dijeron las autoridades israelíes.
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Oren Hazan es muy popular en Israel por escándalos que causa continuamente y aprovechó la ocasión para crear otro aceptando la invitación de Yahiya al Saud para arreglar las cuentas personalmente entre ellos.
Los dos diputados prepararon concienzudamente el encuentro en el puente Allenby, en el que se debía llegar a las manos, yendo al peluquero y caldeando el ambiente con declaraciones amenazantes.
"El zapato de cualquier niño palestino es más honorable que ese villano y su entidad (Israel) y el zapato de cualquier árabe y musulmán es mejor que él y su corrupta entidad, que carece de origen y de religión", dijo al Saud.
El malogrado encuentro había suscitado gran interés en ambos países, pero Netanyahu consideró en el último momento que perjudicaría las relaciones bilaterales y ordenó a Hazan regresar a Tel Aviv.
Oren Hazan dijo que el encuentro simplemente "se aplazó" hasta una nueva fecha que todavía no se ha comunicado.
