Según declaró a Sputnik el primer vicepresidente del Comité para la Defensa y la Seguridad del Consejo de la Federación, Moscú tendrá que adoptar medidas mucho más serias y amplias.
Agregó que "al tomar decisiones en el ámbito internacional, algunos países europeos solo tienen en cuenta la rentabilidad de estas decisiones, y no el sentido común o el cumplimiento de la legislación".
Klintsévich destacó que las nuevas sanciones antirrusas también afectan a los intereses económicos de Europa, lo que hará que los europeos reconsideren su actitud hacia las acciones "contraproducentes" de Washington.
"Vamos a estar bien, tenemos una enorme capacidad de recuperación, y EEUU tendrá que reaccionar a nuestra respuesta. Es imposible poner de rodillas a Rusia, así que todo esto va a acabar mal para Europa y EEUU. El hecho es que todo lo que hacen los estadounidenses es sumamente injusto", concluyó.
Como respuesta, el Ministerio de Exteriores ruso pidió que Washington limitara a 455 personas la plantilla de sus legaciones diplomáticas y consulares en Rusia para el próximo 1 de septiembre y anunció que suspende el acceso de los estadounidenses a varios inmuebles en Moscú, entre ellos, la residencia de verano —dacha, en ruso— diplomática ubicada en el parque natural de Serebriani Bor, en Moscú.