Se informó de un nuevo lanzamiento de misil balístico por Corea del Norte, que cayó en el mar del Japón tras sobrevolar entre 700 y 1.000 kilómetros, según diversas estimaciones.
Mientras, según los militares surcoreanos, las cifras eran de 3.700 y 1.000 kilómetros, respectivamente.
"La reacción de Rusia a los lanzamientos de misiles por Corea del Norte sigue siendo inalterable y es absolutamente negativa", dijo Klintsévich al añadir que Rusia está en contra de los intentos de atizar la tensión en cualquier región del mundo, la península de Corea incluida.
Sin embargo, "sería excesivo convertir a Pyongyang en un chivo expiatorio, pues sus lanzamientos de misiles representan una especie de respuesta a la política que EEUU lleva años promoviendo en el Oriente Lejano y que apunta contra Corea del Norte", aseveró el senador ruso.
En opinión del legislador, fue precisamente la política estadounidense la que dio origen al programa de misiles de Pyongyang.
"EEUU no hace absolutamente nada para atenuar la tensión, en cambio, la ley que introduce nuevas sanciones contra Corea del Norte, aprobada esta semana por ambas cámaras del Congreso de EEUU, no hará sino empeorar la situación", enfatizó Klintsévich.
Según Klintsévich, en el mundo actual todos los procesos están interconectados, directa o indirectamente, y "EEUU, pisoteando todas las normas del derecho internacional, incita a que otros hagan lo mismo".
