"Las empresas energéticas europeas afrontan la amenaza de unas sanciones de EEUU, dirigidas a aumentar artificialmente las exportaciones del gas natural licuado de EEUU a Europa y los institutos de la UE deben centrarse en el apoyo de los proyectos energéticos en vez de obstruir su realización", dijo.
También durante esta jornada la Cámara de Representantes y el Senado de EEUU votarán un proyecto de ley sobre nuevas sanciones a Irán, Rusia y Corea del Norte acordado el 22 de julio.
Conforme al proyecto, el presidente de EEUU podría imponer sanciones a personas y empresas que hacen una inversión, venden, alquilan o proporcionan a Rusia servicios, tecnología, información o apoyo para la construcción de tuberías rusas de exportación de hidrocarburos en proyectos cuyo valor de mercado sea equivalente o superior a un millón de dólares, o cubran un período de 12 meses y tengan un valor agregado de cinco millones de dólares o más.
Asimismo, la enmienda impediría a las entidades rusas sujetas a las sanciones financiarse a más de 14 días en EEUU, en el caso de los bancos, y a más de 30 días, en el caso de las empresas de la industria del petróleo y el gas.
El presidente de EEUU también tendría limitados los recursos para levantar las restricciones impuestas.
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La normativa estadounidense deja la puerta abierta a las sanciones contra las compañías europeas por colaborar con Moscú en el sector energético, en concreto en el proyecto Nord Stream 2 que prevé el tendido de dos tuberías de gas con capacidad para 55.000 millones de metros cúbicos anuales desde la costa rusa hasta Alemania por el fondo del mar Báltico.