Las causas de esa decisión no fueron señaladas, aunque la situación política en que se encuentra el líder brasileño resulta poco apropiada para realizar viajes importantes.
El presidente Temer fue denunciado de un delito de corrupción pasiva ante el Tribunal Supremo Federal.
El mandatario podría perder el cargo en las próximas semanas si no reúne los apoyos suficientes en la Cámara de Diputados para frenar el proceso.