"Creo que nadie logrará cuestionar los resultados de estas elecciones, y los que perdieron deben sacar las conclusiones sobre su propia actividad y su modo de trabajar en vez de buscar motivos en el exterior", dijo Putin en una entrevista con el director estadounidense Oliver Stone grabada de julio de 2015 a febrero de 2017.
El líder ruso destacó que el actual presidente de EEUU, Donald Trump, y su equipo orquestaron una campaña electoral "muy adecuada".
A juicio de Putin, Trump fue elegido como presidente porque "el pueblo de EEUU espera grandes cambios".
"Ello está relacionado con las cuestiones de seguridad, de la lucha contra el desempleo y la creación de nuevos puestos laborales y se trata de la protección de los valores tradicionales", señaló.
El líder ruso admitió que Trump en sus discursos preelectorales "se pasó en varios asuntos".
"Pero resultó que tenía razón, consiguió tirar las fibras del corazón de la gente", enfatizó.
Al refiriese a la derrota del equipo demócrata, Putin recalcó que los hackers que filtraron archivos con los correos electrónicos del jefe de la campaña de la candidata Hillary Clinton, John Podesta, "no mintieron, no compilaron nada ni engañaron a nadie".
La Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EEUU, la CIA y el FBI publicaron en enero un informe acusando a Moscú de haber orquestado una campaña de influencia para minar la confianza en el proceso democrático en EEUU y reducir las opciones de la candidata demócrata en las presidenciales de 2016.
Esta campaña de influencia, según el informe, habría sido aprobada al más alto nivel e incluyó hackeos, filtraciones y uso de medios de información y redes sociales pero no repercutió en el conteo de votos.
Tanto el Kremlin como el Ministerio de Exteriores ruso negaron rotundamente la implicación de Rusia en los supuestos ciberataques en las elecciones en EEUU.
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Hasta la fecha, el Gobierno de EEUU no ha presentado ninguna prueba que confirme la responsabilidad de Moscú en esos supuestos ataques informáticos.
