"Es otra noticia falsa", dijo a Sputnik el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
La cadena televisiva norteamericana aseguró, citando a funcionarios anónimos del Gobierno estadounidense, que el objetivo del ataque informático era generar tensión entre Washington y sus aliados árabes, en concreto con Catar.
A este bloqueo diplomático se sumaron posteriormente Libia, Yemen, Maldivas y Mauritania.
La crisis se desató después de que la agencia de noticias QNA citara unas supuestas declaraciones del emir catarí Tamim bin Hamad al Thani a favor de la normalización de las relaciones con Irán.
El ataque informático a la agencia QNA se produce tres meses después de que WikiLeaks destapara el mayor centro de hackeo de la CIA en Alemania.
En particular, el portal de filtraciones reveló que el consulado estadounidense en Francfort del Meno ejercía como base para realizar ataques informáticos en Oriente Medio, Europa y África.
