Se planea también que Gabriel y su par turco, Mevlut Cavusoglu, aborden las relaciones bilaterales y los asuntos internacionales.
"Debatimos el problema de Incirlik y reiteramos la propuesta que habíamos hecho (durante la cumbre de la OTAN) en Bruselas a (la canciller federal de Alemania, Angela) Merkel. Los diputados deberían empezar con una visita a Konya donde hay una base de la OTAN", declaró Cavusoglu.
Durante la rueda de prensa conjunta, Cavusoglu señaló que en Alemania se multiplican los ataques de radicales a mezquitas y representantes de la comunidad turca, y que el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) —organización proscrita en Turquía por terrorista— celebra reuniones y difunde vídeos en territorio alemán.
Por su parte, Gabriel afirmó que se siente "afligido" por la decisión de Ankara que atribuyó a la política interna.
"No tenemos aún un plan claro con respecto a Incirlik, volveremos a considerar el asunto y compartiremos nuestras reflexiones con la parte turca. En cualquier caso, queremos resolver el problema en clave pacífica", dijo.
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El ministro añadió que Alemania califica de "evolución positiva" la propuesta de que legisladores germanos visiten la base en Konya y expresó la esperanza de que Ankara autorice luego una visita a Incirlik.
La canciller alemana, Angela Merkel, advirtió a finales de mayo que si a los diputados se les denegaba el acceso a la base, los militares alemanes abandonarían Incirlik y Berlín buscaría otras vías para mantener su contingente militar en países vecinos.
Los militares alemanes que se encuentran en la base turca apoyan a la coalición internacional en Siria e Irak en su lucha contra Daesh (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia), en el marco de la misión de inteligencia AWACS de la OTAN.