Anteriormente, el medio estadounidense Washington Post denunció una supuesta "revelación de información altamente clasificada" por parte de Trump, que podría "poner en peligro a una fuente de inteligencia crítica sobre Daesh" (grupo terrorista proscrito en Rusia y otros países).
"Durante la reunión (…) discutieron diversos temas sobre los esfuerzos y las amenazas comunes respecto al terrorismo", pero "no discutieron fuentes, métodos u operaciones militares", dijo el Secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson en un comunicado.
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"El presidente y el canciller ruso hablaron de las amenazas comunes que representan los grupos terroristos, incluidas las amenazas para la aviación. En ningún momento se discutió sobre fuentes o métodos de inteligencia ni se divulgaron operaciones militares que ya no fueran de dominio público", afirmó el asesor presidencial.
La adjunta de McMaster responsable de estrategia, Diana Powell, también presente en la reunión, coincidió con el asesor: "Esta noticia [publicada por Washington Post] es falsa; el presidente solo discutió sobre las amenazas comunes que tienen ambos países".
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La versión de Washington Post
La fuente fue considerada tan sensible que el conocimiento de los detalles "se encuentra muy restringido dentro del Gobierno estadounidense", dijeron funcionarios anónimos citados por el periódico.
Más aún, el país aliado "no habría autorizado" a Estados Unidos a compartir tal información con Rusia, y las fuentes advirtieron que el comentario de Trump podía poner en riesgo esa cooperación de un aliado que tiene acceso al funcionamiento interno de Daesh.
La embajada de Rusia en Estados Unidos se abstuvo de comentar esta noticia.
