A juicio de la diplomática, de momento la relaciones ruso-estadounidenses distan de ser positivas, aunque sí existe una visión de "cómo y dónde se puede empezar a cooperar para sacar la situación de la caída en picada".
"Ambos países tienen todas las posibilidades para acelerar este proceso", apuntó.
Por ello, de momento Estados Unidos "está limitado en sus acciones".
Desde 2014, EEUU puso en marcha varios paquetes de sanciones contra ciudadanos y sectores económicos enteros de Rusia por su supuesta intromisión en la crisis que vive el este de Ucrania.
El distanciamiento se acentuó en septiembre de 2016 cuando las dos potencias no lograron un alto el fuego duradero en Siria.
La tensión creció en los últimos meses del mandato del expresidente Barack Obama después de que altos cargos de su Gobierno acusaran a Moscú de inmiscuirse en el proceso electoral de EEUU.