El 26 de abril la defensora del pueblo de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), Daria Morózova, comunicó que el subgrupo humanitario había acordado comenzar a partir de este viernes a verificar si los prisioneros de verdad no quieren abandonar el territorio controlado por el Gobierno de Kiev en caso del canje.
"La verificación de las declaraciones de los individuos que cometieron crímenes contra Ucrania pero que pueden ser indultados en el marco legal a fin de liberar a nuestros rehenes y que a la vez se niegan a ir a ciertas zonas de las provincias de Donetsk y Lugansk (denominación oficial ucraniana para las zonas fuera de control de Kiev), iniciará el 28 de abril", escribió Gueráschenko en su cuenta de Facebook.
Semejantes declaraciones provocaron sospechas tras lo cual el subgrupo humanitario acordó verificar si de verdad han tenido lugar.
El canje de los prisioneros entre las milicias de Donbás y Kiev es uno de los puntos principales de los acuerdos de Minsk para resolver el conflicto en Ucrania oriental.
Según datos de la ONU, las hostilidades han provocado más de 10.200 muertos desde el inicio de la crisis.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia.