Según el periodista turco y experto en Rusia y las relaciones ruso-turcas, Cenk Baslamis, "los países tienen discrepancias".
Al mismo tiempo Turquía no va a cortar sus lazos con EEUU, señaló.
"En estas circunstancias, los contactos entre Moscú y Ankara ciertamente se harán muy importantes", opinó.
A su vez, el economista Tuncay Tursucu, afirmó que "las relaciones entre los dos países continuarán desarrollándose en un ambiente amistoso y cauteloso".
El 51,41% de los turcos, según el escrutinio preliminar, avalaron este domingo la reforma constitucional que convertirá a Turquía en una república presidencialista.
También se prevé suprimir el puesto de primer ministro, reducir de 25 a 18 años la edad mínima para postularse a la asamblea legislativa y aumentar de 550 a 600 el número de los escaños parlamentarios.
Las enmiendas a la Constitución son parte de la agenda política del ex primer ministro y líder del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), Recep Tayyip Erdogan, desde que en agosto de 2014 fue elegido presidente por sufragio directo, por primera vez en la historia de Turquía.
Erdogan podría quedarse al frente del Estado hasta 2029, por dos mandatos consecutivos de cinco años si vence en las elecciones del 3 de noviembre de 2019 que marcarán la conversión de Turquía en una república presidencialista.