"El encuentro trilateral en Moscú se centrará en la discusión de los últimos eventos en Siria y el intercambio de puntos de vista", cita la agencia de noticias ILNA al ministro iraní.
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Según indicaron, la reunión establecerá un fundamento para el desarrollo de nuevos enfoques y la búsqueda de soluciones reales al problema.
La medida ilegítima unilateral emprendida por Washington en Siria es un desafío a los principales jugadores —sobre todo, Irán y Rusia— en el proceso de la resolución de la crisis, opinó Konstantín Sokolov, miembro de la Academia de Ciencias Naturales de Rusia.
"La provocación [de EEUU], que ha sido el motivo de la reunión de los jefes de la diplomacia de los tres países, está dirigida en igual medida contra Siria, Rusia e Irán", apuntó el experto.
A su juicio, "el acto de agresión de EEUU demuestra que Washington está dispuesto a transferir la situación en Oriente Próximo a un nuevo nivel de confrontación militar". Además, prosiguió, entre los objetivos del país norteamericano figura "garantizar su participación directa en contra de los estados soberanos".
"[Los terroristas en Siria] son míticos debido a que Occidente les apoya. Todo esto se hace para socavar la estabilidad de toda la región y llegar allí con la fuerza militar", apuntó.
Sokolov explicó que la situación en la región "está organizada de acuerdo con los documentos que rigen la estrategia de EEUU e Israel" en el marco del plan de un 'Gran Oriente Próximo' publicado hace cerca de 15 años.
Así, el plan es la consecuencia de otro plan —Plan Sionista para el Gran Israel— proporcionado por el periodista israelí Oded Yinon en 1982. La idea del nuevo plan estadounidense, según Sokolov, no ha cambiado: se centra en "romper la condición de Estado nacional de todos los países árabes para poder ejercer un control externo sobre ellos".
"La potencia nuclear dominante [de la región] será Israel", profundizó el experto.
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Además, en el marco de este plan existen varios "asistentes", que quieren recibir algunas preferencias del 'Gran Hermano', mientras otros países defienden la condición del Estado nacional de Siria, continuó.
"Rusia e Irán son los defensores. Por lo tanto, la reunión en Moscú es una reunión de los aliados", admitió Sokolov.
Apuntó que en el marco de los encuentros anteriores del mismo formato se pudo "tomar decisiones importantes" respecto a la crisis siria. Asimismo, otros jugadores importantes —por ejemplo, Turquía— se reunieron al proceso de la resolución del problema.
Ankara revisó la táctica de sus acciones y su postura en Siria e incluso hizo concesiones, subrayó Bonesh.
"Tras el ataque químico en la provincia de Idlib la llamada oposición moderada en Siria asignó toda la responsabilidad exclusivamente al Gobierno sirio. Esto ha alterado el proceso de la solución del problema sirio en muchos aspectos", enfatizó el experto.
De esta manera, la reunión en Moscú será "una especie de nueva etapa para el análisis y asesoramiento sobre la solución del problema sirio a la vista de los recientes acontecimientos".
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De acuerdo con Bonesh, el alto nivel de la tensión diplomática, iniciada por el Gobierno de Trump, junto con el uso de la fuerza militar extranjera en Siria "requieren una cooperación indispensable con todos los jugadores regionales", sobre todo los principales aliados de Damasco.
"Solo gracias a la participación de Rusia e Irán (…), se puede pasar a otro nivel en las negociaciones y encontrar maneras de resolver la crisis en contraposición a las tácticas intimidatorias de EEUU, OTAN y sus aliados, que apoyan el escenario militar y ataques ilegales", concluyó.
