"El motivo de las recomendaciones es la ineficacia de las medidas anteriores. Además fija un plazo, para junio de 2017 tiene que haber resultados efectivos. Es una manera de presionar a los países miembro para efectivizar las deportaciones", dijo al programa radial Telescopio de Sputnik la especialista española Raquel Rodríguez, que tiene un máster de Investigación sobre Globalización y Desarrollo por la Universidad del País Vasco, y está preparando su doctorado en temas migratorios.
La reunión de la comisión estaba establecida desde febrero, cuando en Malta, los Estados miembro coincidieron en la necesidad de reducir el flujo de ingresos e incrementar el de egresos. Aquellos Estados que no demuestren avances serán sancionados económicamente. Por el contrario, habrá recompensas en el reparto de futuros fondos que se destinen a la aplicación de la normativa comunitaria en materia de migración.
Organizaciones que trabajan con migrantes y analistas que siguen el tema de cerca pronostican que a medida que se incrementen las expulsiones, aumentarán proporcionalmente las violaciones a los derechos humanos.
"La política migratoria europea está enfocada a la seguridad de sus ciudadanos. Ahora se está proponiendo el uso de drones [para cuidar las fronteras] porque ya no es efectiva la barrera física, que está provista de cuchillas que cortan a las personas. Más que medidas de seguridad son medidas de coerción: si pasas te vas a lastimar", señaló Rodríguez, para quien nunca se mencionan las causas que originan este fenómeno.
"Detrás de la llamada crisis de refugiados, que se inició en 2014, 2015, hay responsables. Los sirios escapan de su país por motivos puntuales, lo mismo ocurre con las poblaciones africanas. Hay acuerdos comerciales por los cuales pude entrar libremente la materia prima y los minerales preciosos, pero las personas tienen prohibida la entrada. Europa tiene una gran culpa en lo que está sucediendo", agregó.