"Si comparamos nuestras relaciones con China y con Japón, no veo coincidencias más que en la cercanía geográfica (…) Desde el punto de vista de la cantidad y calidad de las relaciones, son incomparables", dijo al periódico Kommersant.
Las relaciones con China, agregó, "se caracterizan, sobre todo, por la estabilidad y no por la susceptibilidad a los diversos tipos de fluctuaciones del mercado".
"Con China tenemos relaciones de asociación estratégica integral y de cooperación; con Japón, estamos dando los primeros pasos", señaló.
Afirmó que "se observa en las relaciones ruso-japonesas una tendencia positiva, después de un largo período de estancamiento".