Las hostilidades entre el Ejército ucraniano y las milicias se intensificaron desde la semana pasada y los dos bandos se acusan mutuamente de la escalada del conflicto.
"Kiev recurre deliberadamente a las provocaciones para presentar a Rusia como país agresor", señaló Matvienko al comentar la intensificación de los enfrentamientos en el este de Ucrania.
Matvienko llamó a la comunidad internacional a obligar al régimen de Petró Poroshenko a detener la guerra "fratricida" y a cumplir los acuerdos de Minsk para restablecer la paz.
La ONU instó al líder ucraniano y a las milicias a poner fin a las hostilidades.
Desde el Kremlin expresaron su preocupación por los ataques desproporcionados del Ejército ucraniano que socavan los pactos de Minsk.
Ucrania continúa desde abril de 2014 una operación militar en varias áreas de las regiones de Donetsk y Lugansk donde se proclamaron repúblicas populares en respuesta al violento cambio de régimen ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
El conflicto ha dejado más de 10.000 muertos y 22.700 heridos, según estimaciones de la ONU.