Trump minimiza las críticas por prohibir el ingreso de los refugiados a EEUU

NUEVA YORK (Sputnik) — El presidente de EEUU, Donald Trump, desestimó las críticas a la orden ejecutiva de inmigración que firmó el 27 de enero, en el que vetó el ingreso al país de refugiados sirios y de personas provenientes de siete países con mayoría de población islámica.

"Sólo 109 personas de 325.000 fueron detenidas y recluidas para ser interrogadas", escribió Trump en su cuenta de la red social Twitter.

Only 109 people out of 325,000 were detained and held for questioning. Big problems at airports were caused by Delta computer outage,…..

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 30 de enero de 2017

protesters and the tears of Senator Schumer. Secretary Kelly said that all is going well with very few problems. MAKE AMERICA SAFE AGAIN!

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 30 de enero de 2017

La decisión del mandatario generó el rechazo de varios representantes del Partido Demócrata, así como de miles de personas que se manifestaron en distintas ciudades y aeropuertos del país.

"Los grandes problemas en los aeropuertos fueron causados por el apagón de (la compañía aérea) Delta, los manifestantes y las lágrimas del senador (demócrata, "Chuck") Schumer", escribió el jefe de Estado.

Asimismo, agregó que el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, aseguró que todo había transcurrido bien, "con muy pocos problemas".

En otro comentario, Trump aseguró que "no hay nada agradable en la búsqueda de terroristas antes de que puedan entrar a nuestro país" y que este asunto fue un "gran" tema durante su campaña electoral.

"Si la orden ejecutiva hubiera sido anunciada con una notificación de una semana, el "malo" se hubiera apresurado a entrar en nuestro país durante esa semana", escribió y agregó que hay "muchos "tipos" malos por ahí".

El viernes, Trump firmó el decreto para "Proteger a la nación de la entrada de terroristas extranjeros a EEUU" (Protecting the Nation From Foreign Terrorist Entry Into the United States, en inglés), que anula la admisión de refugiados a EEUU por 120 días y prohíbe indefinidamente la aceptación de refugiados sirios con el fin de impedir la infiltración de terroristas.

Asimismo, el decreto prohíbe por 90 días la entrada en EEUU a los ciudadanos de siete países con población mayoritariamente musulmana: Irak, Irán, Libia, Siria, Somalia, Sudán y Yemen.

Durante el fin de semana, miles de estadounidenses, incluyendo al senador Schumer, protestaron en los aeropuertos de las principales ciudades del país para exigir la cancelación de las restricciones impuestas por el presidente.