Al señalar que tras el Brexit y la victoria de Donald Trump en las presidenciales estadounidenses pueden darse serios cambios políticos también en Francia, la diputada destacó el papel especial de su país en la edificación de una nueva Europa.
Dijo que no se plantea la tarea de destruir la idea europea, sino la de edificar una Europa nueva basada en el respeto a los pueblos, a su soberanía e idiosincrasia.
"Rusia deberá ocupar el lugar de un miembro de pleno derecho en este proyecto europeo, porque es nuestra aliada en el aspecto civilizador, tenemos anhelos comunes y debemos defenderlos juntos", señaló, subrayando que "no responde a los intereses del pueblo francés tener malas relaciones con Rusia".