"Probablemente cualquiera de los candidatos presionaría para subir el gasto en Defensa, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoría de Estados europeos no llegan a ese objetivo del 2%", expuso este académico especializado en la política exterior estadounidense.
En opinión de Tovar, esta cuestión puede suponer un escollo en las relaciones bilaterales con EEUU sin importar quién sea el próximo presidente del Gobierno estadounidense, aunque subraya que el candidato republicano, Donald Trump, "ha tenido una postura más contundente al respecto" que su rival.
Este profesor de relaciones internacionales considera que, a priori, las relaciones de España con EEUU no sufrirán grandes cambios con la victoria de cualquiera de los dos candidatos a la Casa Blanca.
"Teniendo en cuenta los intereses de seguridad de Estados Unidos en España, se prevé cierta continuidad, sobre todo en lo referente a la cooperación militar", expresó Tovar.
"En el caso de que gane Hillary Clinton, aunque su política exterior es diferente de la de Obama, sería de esperar que se produjera cierta continuidad en lo referente a las relaciones con España", afirmó Juan Tovar.
En ese sentido, Tovar recordó que Obama "dio la relación con España prácticamente por sentada" y por ello no se preocupó por visitar el país hasta el final de su segundo mandato.
"España es para Estados Unidos un aliado que no da demasiados problemas", afirmó este analista, recordando que últimamente los dos países alcanzaron acuerdos en materia de defensa para "reforzar la presencia militar" en las bases estadounidenses de Morón de la Frontera (Sevilla) y Rota (Cádiz).
"Siguiendo los documentos estratégicos, podemos deducir que Estados Unidos se encuentra en el cuarto lugar dentro del orden de prioridades de la política exterior española, algo que es demasiado bajo si se tiene en cuenta que la relación entre ambos países juega un papel muy importante en temas de Seguridad y Defensa", opina Tovar.
En consecuencia, este analista considera que "España necesita una revisión estratégica" para dar mayor prioridad a mantener unas buenas relaciones con EEUU.