"Estaré encantado de hacer todo lo posible para apoyar y aumentar la confianza entre los Estados miembros en general (…) y animaré siempre a estos dos países, como otros, para acercarse", dijo Guterres a Sputnik.
Destacó que "EEUU y Rusia son los países clave en el mundo de hoy".
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Guterres expresó su seguridad de que "si esos países se acercan tendrán una gran posibilidad de movilizar a otros y demostrar que las discrepancias existentes pueden ser superadas".
Además, señaló que ahora el mundo "carece de la paz" y expresó que los Estados son responsables de mantener el liderazgo en el proceso de establecimiento de la paz.
"Haré mi mayor esfuerzo para cooperar con los Estados para proponer mis servicios intermediarios con el fin de crear condiciones para que la gente cuando se reúne juntamente comprenda que pierde todo a causa de los conflictos que tenemos hoy", precisó.
Guterres señaló que espera de EEUU y Rusia que creen condiciones para la paz estable y la lucha antiterrorista eficaz.
"Espero que EEUU, lo mismo que Rusia, demuestren su voluntad de progresar en la creación de condiciones para que nuestra prioridad llegue a ser la paz y para tener posibilidades eficaces en la lucha contra el terrorismo que hoy amenaza a la gente", precisó.
Las fuerzas más influyentes en el conflicto sirio deben negociar
António Guterres apostó por sentar en la mesa de negociación a los que tienen más influencia en Siria para avanzar hacia la solución del conflicto en este país.
"La cuestión clave aquí es reunir a aquellos que tienen el papel central en esta crisis, que participan en el conflicto o bien tienen cierta influencia sobre las partes del mismo", dijo.
"La guerra que se ha convertido en una pesadilla para los habitantes de Siria, que se ha convertido en una terrible amenaza a la estabilidad regional y que tiene vínculos evidentes con el terrorismo", afirmó.
Siria vive desde 2011 un conflicto en el que el Ejército gubernamental se enfrenta a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas proscritas en Rusia y otros países.
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Desde su comienzo, la guerra en Siria provocó entre 300.000 y 400.000 muertos, según altos cargos de la ONU.
