"Para preservar la paz en el continente europeo, de ningún modo se pueden olvidar las lecciones del sangriento siglo XX. Nuestro deber es no permitir que el hilo del diálogo se corte", insistió.
Según indicó, este acercamiento constante es fundamental para establecer relaciones de confianza con Moscú y minimizar el riesgo de un incidente militar. El ministro de Exteriores germano se identifica con los "sucesores" de Willy Brandt, que debían "preocuparse por las relaciones con Rusia".
"Adónde iremos a parar si el deseo de entender la política exterior se convierte en un insulto", se pregunta.
En su artículo, Steinmeier aseveró que, a largo plazo, la seguridad en Europa es posible solo junto a Rusia y no frente a ella. Lo mismo tiene que ver con Oriente Próximo.
"No se puede permitir que las discrepancias entre Rusia y Alemania provoquen desencuentros entre los pueblos de ambos países. Nuestra responsabilidad por la paz en Europa está inseparablemente vinculada con la responsabilidad por cuidar las relaciones ruso-alemanas", puso de relieve.