Confió en que Azerbaiyán y Armenia "de verdad quieran encontrar una solución al problema para vivir en paz y armonía con el fin de cooperar y desarrollar sus economías".
Destacó que lo más importante es que la solución se tome por los líderes de Armenia y Azerbaiyán y que los ciudadanos de los dos Estados la acepten.
"Rusia como otros países del Grupo de Minsk podría ser garante", dijo Putin.
El conflicto en torno a la república autoproclamada de Nagorno Karabaj, que divide a Armenia y Azerbaiyán desde 1988, experimentó a principios de abril una escalada después de haber permanecido latente durante más de dos décadas.
Desde el 5 de abril se mantiene un armisticio frágil pero los bandos del conflicto se acusan regularmente de violarlo.
Para impulsar una solución negociada de la crisis se instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk de la OSCE, copresidido por EEUU, Rusia y Francia.