Al cierre de la cumbre de Varsovia, la OTAN emitió una declaración en que señaló que Rusia asume la plena responsabilidad por el empeoramiento de la situación en materia de derechos humanos en Crimea y especialmente por la discriminación de los tártaros.
"A mis colegas y yo nos indignan estas conclusiones que se hicieron sin consultarlo con los tártaros de Crimea y que constituyen un intento de involucrarnos en un proceso político destructivo", dijo Iliásov a RIA Novosti.
Crimea y Sebastopol (ciudad que goza de un estatus especial) se adhirieron a Rusia en marzo de 2014 tras la celebración de un referendo en el que el 96,77 por ciento de los habitantes de Crimea y el 95,6 por ciento de los habitantes de esta ciudad apoyaron la reunificación con Rusia.
Ucrania insiste en que Crimea es su territorio "provisionalmente ocupado", los países occidentales no reconocieron los resultados del referendo celebrado en 2014 e impusieron sanciones contra ciudadanos, empresas y sectores enteros de la economía rusa.
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La Cancillería de Rusia declaró en más de una ocasión que la votación a favor de reincorporarse en Rusia se efectuó en Crimea en plena correspondencia con el derecho internacional y la Carta de la ONU.
