Moscú, 26 mar (Sputnik) — "Ankara fue la autora de esta tragedia y solo ella puede minimizar las consecuencias", dijo a la televisión rusa TV Tsentr.
Las relaciones entre Moscú y Ankara se deterioraron después de que en noviembre de 2015 un caza turco derribara en territorio sirio un avión militar ruso Su-24 que retornaba a su base tras bombardear objetivos terroristas.
Turquía asegura que la aeronave violó su espacio aéreo, mientras que las autoridades rusas sostienen que el aparato no cruzó la frontera turca, lo que confirman los datos de los radares sirios.
Lea también: "El conflicto entre Rusia y Turquía tiene un carácter temporal"
Además, comentando el derribo del Su-24, Peskov afirmó que en el lugar del portavoz del presidente turco habría dimitido.
“Si estuviera en este puesto y pasara lo que pasó, habría dimitido”, dijo.
Asimismo, subrayó que es poco probable para numerosas generaciones borrar las consecuencias de las acciones turcas respecto al derribado Su-24, pero Ankara puede minimizarlas.
Miles de personas, precisó, sufren por esta catástrofe ya que algunas tienen un negocio ruso-turco, mientras que algunas tienen las familias mixtas.
"Quiero confiar en que sean tomadas tales decisiones que minimicen las consecuencias para los que de hecho son participantes de nuestra vida rusa pero al mismo tiempo debemos reconocer que en Moscú nadie pueda olvidar de lo que ocurrió hasta que Ankara haga lo que debe hacer".
Tras el derribo del Su-24 Moscú impuso restricciones económicas a Turquía en los ámbitos de comercio, educación, turismo y empleo.