"Apoyamos los esfuerzos de la OSCE para favorecer la resolución de la crisis en Ucrania. (…) La parte rusa ha aceptado la prórroga del mandato de los observadores de la OSCE en la frontera ruso-ucraniana, en los pasos de Donetsk y Gukovo, hasta el 31 de enero de 2016", dice el comunicado.
El documento aboga también por reforzar la capacidad de la misión internacional y destaca que Rusia está dispuesta a darle apoyo con "efectivos, medios técnicos y financieros".
Los objetivos claves de la Misión Especial de Observación de la OSCE en Ucrania son "vigilar el régimen de alto el fuego, colaborar con el intercambio de prisioneros, ayudar en la investigación de violaciones del derecho humanitario y los derechos humanos, incluidas las fosas comunes y los casos del uso de tipos de armas prohibidos, así como favorecer el diálogo nacional en Ucrania", recuerda la Cancillería rusa, que ve innecesario ampliar el mandato de la misión.
"El Grupo de Contacto de Ucrania es una plataforma única de diálogo directo entre Kiev, Donetsk y Lugansk con mediación de la OSCE y Rusia; se debe lograr el cumplimiento a rajatabla de todos los compromisos derivados del Conjunto de Medidas de Minsk", concluye la nota.
El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, asistirá a la 22ª reunión de los ministros de Exteriores de la OSCE que tendrá lugar los días 3 y 4 de diciembre en Belgrado.