En aquellas elecciones ganó el gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), pero por primera vez desde 2002 perdió la mayoría parlamentaria y no pudo formar un Ejecutivo de coalición en el plazo legal de 45 días.
La interrogante principal de estas elecciones es si el AKP, del presidente Recep Tayyip Erdogan, logra recuperar la mayoría absoluta para poder gobernar en solitario.
Unos 54 millones de votantes tendrán que elegir a 550 diputados, de 16 partidos.
Cuatro formaciones se perfilan otra vez como favoritas: el gobernante y conservador Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), el centroizquierdista Partido Republicano del Pueblo (CHP), el Partido de Acción Nacionalista (MHP) y el prokurdo Partido Democrático del Pueblo (HDP).
Según las encuestas, el AKP podría contar con entre el 40 y el 44 por ciento de los votos; el CHP acapararía entre el 25 y el 27 por ciento y el MHP, entre el 12 y el 13 por ciento.
Se estima que el HDP también supere el listón electoral del 10%, ya que en junio logró obtener el 12,9 por ciento de los votos, lo que le permitió entrar por primera vez en el Parlamento.